QUIENES SOMOS
Somos tres hermanos que en 1987 decidimos aventurarnos en el mundo de los negocios como propietarios. En aquel entonces, alguno de nosotros tenía cierto conocimiento del oficio, pero al comenzar, nuestra juventud y entusiasmo, junto con el apoyo de nuestra familia, nos permitieron forjar lo que hoy en día se ha convertido en uno de los bares más antiguos de Daimiel.
Nuestra filosofía se resume en el lema «La caña hablada». Mientras nuestros clientes disfrutan de nuestros excelentes caldos, aprovechan para entablar conversaciones sobre diversos temas, como fútbol, cine y más. En ocasiones, sentimos que nuestros clientes no solo vienen a nuestro bar, sino que nos consideran parte de su hogar. Nos confían sus pensamientos y preocupaciones, a veces incluso solicitando consejos.
A lo largo de los años, hemos tenido el privilegio de atender a clientes que venían con sus padres y que, en la actualidad, nos visitan junto a sus propios hijos. Esto nos llena de gratitud y nos hace sentir parte de la comunidad.
Durante los meses de verano y en festividades, muchos de nuestros clientes regresan a nuestro establecimiento, y creemos que esto se debe al trato especial que ofrecemos. Estamos agradecidos por la lealtad de nuestros clientes y seguiremos esforzándonos para mantener ese ambiente cálido y acogedor que nos distingue.